Historias de la Natividad, Iglesia de la Natividad, de Avià
Frontal de la Natividad de Santa María de Avià, temple sobre tabla, 1,05 X 1,76 m, siglo XIII, procede de la Iglesia de la Natividad de Avià, MNAC, Barcelona.
María y Jesus en la Natividad
Los frontales, en la parte más antigua de la Edad Media, decoraban la parte delantera de los altares, presentando alguna historia sagrada: aquí es la de la Encarnación e Infancia de Cristo. La imagen se organiza en distintos cuadros. En medio, mayor que los demás, destacando su importancia, está la Virgen María, sentada, con el Niño en su regazo; ella es Trono (o tabernáculo) de Su Hijo, que se muestra muy activo, bendiciendo; María lleva un manto azul con estrellas que manifiesta su presente estado celestial; más arriba de un arco hay dos ángeles que los adoran.
A la izquierda, arriba, dentro de una estructura de arcos, está la Visitación del Ángel Gabriel a María (Ave María), anunciándole que concebirá un Niño, Hijo del Altísimo, por obra del Espíritu Santo; al lado está la Visitación, con el abrazo entre María y su prima Isabel, llena del Espíritu Santo, al experimentar que el niño que espera (Juan Bautista) ha saltado de júbilo en sus entrañas, intuyendo al Salvador; María dará gloria a Dios (Mi alma magnifica al Señor).
Al otro lado, también arriba, está la Natividad, con el pesebre, el asno y el buey y San José, en el establo porque no encontraron hospedaje, antes de la adoración de los pastores.
De nuevo a la izquierda, abajo, están los magos de Oriente que vienen a adorar al Niño, con una gran alegría, representando las tres edades de la vida: ellos son el testimonio de que la salvación es para todos.
Por último, abajo a la derecha, está la presentación en el templo, donde Simeón reconocerá al Mesías en el Niño y hará la alabanza (Ahora Señor ya puedes dejar marchar la paz a tu siervo).